Horacio García Rojas: “Batman Azteca es fantasía pero nos lleva a hablar de la realidad”
El Caballero de la Noche invade las tierras y templos aztecas en Batman Azteca: Choque de imperios, donde gracias al talento de Anima Estudios y Warner Bros. crean el primer héroe encapuchado puramente mexicano.
Contando con las voces de Omar Chaparro como Joka y Álvaro Morte como Hernán Cortés/ Dos Caras, la cinta animada se estrenó en cines mexicanos.
En Clímax en Medio charlamos con Horacio García Rojas, quien da voz y vida a esta encarnación del popular héroe de DC.
“Para mí es un gusto hacerlo”, comentó el actor sobre ponerse el manto de Batman Azteca. Busqué durante toda mi carrera estar involucrado en estas narrativas y un poco el background que tengo ahorita son los universos que me significan tanto, desde chavito hasta ahorita como adulto”, expresó.
“La fantasía, el realismo mágico, el dark fantasy, la ciencia ficción, han sido espacios imaginarios que me importan. Y el pasado histórico de mi país es algo que me parece mágico, porque si bien hay cosas que tienen que ver más con la historia que con la fantasía, el pasado mesoamericano y prehispánico me parece así”, añadió.

Una historia épica en el Imperio azteca
Bajo la dirección de Juan Meza-León, llega Batman Azteca: Choque de imperios, una nueva historia del caballero de la noche ambientada en la época del Imperio azteca. Seguimos a Yohualli Coatl, un joven azteca que experimenta una tragedia cuando su padre y líder de la aldea, Toltecatzin, es asesinado por los conquistadores españoles.
Yohualli escapa a Tenochtitlán para advertir al rey Moctezuma y a su sumo sacerdote, Yoka, del peligro inminente. Usando el templo de Tzinacan, el dios murciélago, como guarida, Yohualli entrena con su mentor y asistente, Acatzin, desarrollando equipo y armamento para enfrentar la invasión española, proteger el templo de Moctezuma y vengar la muerte de su padre.
“Siempre he dicho que pensar en estos hombres y mujeres que vestían túnicas blancas perfectas, con oro que engarzaba plumas, donde la pluma era lo valioso y no necesariamente el metal precioso, verlos bajando de esas pirámides que estaban construidas en una armonía perfecta con los astros, el sol, la luna y el poder combinarlo siempre ha sido como una búsqueda para mí”, reflexionó el histrión.

Horacio García Rojas y su conexión con lo fantástico
Darles voz a héroes, villanos o personajes puramente ligados al mundo mágico mexicano no es nuevo para Horacio.
“Cuando llegó la invitación de Diablero, era evidente que estaba diseñado y preparado para hacer ese tipo de cosas y creo que todo inició desde La Carga y Morenita: El escándalo, que fue mi primer largometraje”, dijo.
“Me interesó lo que podía significar el robo de la Virgen de Guadalupe y el impacto social que le podía generar este país porque no solo es el símbolo católico, sino que sincretiza la madre naturaleza junto a algo que era importante para los pueblos que existieron muchos años antes de la llegada de aquellos que venían del otro lado del mar”, agregó.
Para el actor, hay una conexión especial entre esos proyectos: “Todos esos universos del imaginario colectivo y de la historia de mi país a mí siempre me ha significado y siempre los busqué”, afirmó Horacio García Rojas.

La ficción como espejo de la historia
“De alguna manera la vida me fue dando estos regalos de poder participar en esos proyectos y a partir de Diablero se empezaron a abrir mucho más puertas que me llevaron a Soldados o Zombies, a Coyotl y que ahora culminan una pequeña etapa de mi vida, llegando a darle voz a un personaje tan icónico para la cultura pop, que se mezcla con algo tan importante para nosotros, que es el símbolo de la caída de México-Tenochtitlán en Batman Azteca”, sumó.
La ficción histórica es un elemento muy valioso para este relato y para Horacio García Rojas es un medio importante para acercarte a la cultura e historia: “Aprendí de los griegos a partir de Furia de titanes. Ahí conocí la manera de ver el mundo a partir de sus dioses, además de que la cultura griega es cultura madre de occidente”, comentó.
“Entonces, a partir de la ficción fantástica podemos entender muchas cosas de nuestro propio pasado. Nuestros antepasados mismos creaban leyendas para explicar las cosas que probablemente eran más difíciles de explicar con teorías basadas en ciencia y realidad”, confesó.
Para el histrión hay algo especial en la concepción de estas creencias: “Justo creo que las leyendas y la fantasía nos ayudan a contar muchas cosas de nuestra historia. Entonces creo que a partir de Batman Azteca podemos indagar en ella”, expresó.

Un legado cultural en el símbolo de Batman
“Esta cinta me llevó a mí como padre y a mi hija a platicar mucho de nuestro pasado histórico y de cómo sigue presente en un país donde se hablan tantas lenguas vivas. Además, este es el primer Batman 100% original mexicano”, continuó.
“Nosotros hicimos las voces originales y quien escuche y vea esta película en inglés, esas voces están dobladas Eso es sumarle un escaloncito más a los legados de todos los que hemos podido ser portavoces de este gran personaje”, apuntó a su vez el actor.
Además de sumar un punto más al legado del héroe, Batman Azteca busca abrir ese tipo de conversaciones sobre la representación cultural mexicana.
“Esto nos va a llevar a que nosotros nos sentemos y platiquemos sobre quién era Tezcatlipoca y qué representaba, quién era Huitzilopochtli y qué representaba, qué sucedió realmente en Cholula, si hubo una matanza o no, si hubo un sistema de castas o despojos, si hubo robo de oro”, señaló Horacio García Rojas, que tampoco le teme a la polémica que la cinta pueda desatar.

Batman Azteca como detonador de diálogo
“Que hablen, que dialoguen, porque al final de cuentas creo que si una ficción fantástica basada en un superhéroe nacido de las tiras cómicas nos está llevando a reflexiones importantes de este país sobre qué pasó hace 500 años que todavía se ve reflejado en el presente, que es la pregunta realmente importante, no quién fue el culpable de lo que pasó hace tiempo”, siguió.
“El juicio de la historia de alguna manera ya se ha dictado y buscar los culpables de algo que pasó hace 500 años creo que sería una pérdida de tiempo”, manifestó.
Para Horacio García Rojas es importante conectar lo sucedido en la historia con la conciencia social: “La reflexión de qué de eso que pasó hace 500 años sigue repercutiendo de manera negativa en el presente, sobre todo en los territorios en donde sucedió, porque es muy fácil hablar desde otro territorio donde no se vivieron esas cosas, es lo importante”, expresó.
“Y ahí es donde está la discusión. Tengámosla de frente, amorosamente, respetando los argumentos del otro y sin sesgos ideológicos que tienen que ver con el clasismo y con el racismo”, continuó.

Una invitación al diálogo sin prejuicios
“Con yo soy mejor y yo sé más que tú. No, tú no eres ni mejor ni yo soy mejor que tú. Y no sabes más que yo ni yo sé más que tú. Hay conceptos y percepciones de los eventos dependiendo de nuestras posiciones y contextos. Dialoguemos sobre eso”, añadió.
Y es que desde la cultura pop también se puede encontrar una profundidad: “Estamos en un momento en el que estamos reconociendo que no nos vamos a inclinar ante nadie más y lo digo de manera muy amorosa”, razonó el mexicano.
“Puedo respetar las diferencias y las maneras de ver diferente de las gentes, puedo dialogar, pero no me pidas que me incline porque eso no va a pasar, porque los demás y yo estamos en la misma posición y no le voy a pedir a nadie que se incline ante mí tampoco”, comentó.
“Vamos a hablar de frente a frente, ojos con ojos, corazón con corazón. Y si se puede con un mezcal o un tequila en mano para que la plática sea más sabrosita, pues hagámoslo”, complementó Horacio García Rojas.

Ficción, historia y libertad creativa
Asimismo, deja un mensaje para aquellos que exigen una fidelidad histórica en la cinta animada: “Banda, es fantasía, es ficción, no estamos tratando de contar los hechos asumiendo que así sucedieron. Batman no existe, es un héroe fantástico”, dijo.
“Entonces, esta historia de Batman Azteca se cuenta a partir de la perspectiva de un superhéroe fantástico de ficción, tendríamos que tomarlo así. Y a partir de eso es solo reinterpretar nuestra historia y que nos lleve a hablar de la realidad”, añadió.
Otro aspecto destacado es que una de las productoras mexicanas detrás de Batman Azteca es el hecho de que los creadores de las cintas de las leyendas, Anima Estudios, sean quienes alzaran la mano para esta reinvención del hombre murciélago.
“Anima ha sabido ver lo que ante los ojos de todos está, pero aquí hay parte de la industria que parece que no lo ve porque sigue obsesionada en contar narconovelas e historias que hacen bastante apología de algo tan doloroso para este país como es el ascenso del crimen organizado y la falta de oportunidades que vuelve a los chicos y a las chicas a tener que verse involucrados en eso”, aseveró Horacio.

Contra la repetición de narrativas
“Hay una obsesión de gran parte de la industria en querer seguir contando esas historias o la clásica historia de la jovencita que desea casarse con el príncipe azul y ser rica y su felicidad está solo en el dinero y tan solo ver eso”, continuó.
“Estudios como Anima nos han mostrado que hay otra cosa importante que hay que contar y tiene que ver con las leyendas de este país, con los alebrijes, las calaveritas, el Charro Negro y estas historias que nos han acompañado a lo largo de 500 años de historia”, acotó.
El actor considera relevante el trabajo de estos estudios porque acercan de forma original algunos aspectos de identidad a las nuevas generaciones: “A mí me parece que es un camino muy bonito para poder hablar a los niños y las nuevas generaciones de tu propia historia. Entonces, ahora se mezcla con este personaje tan icónico como es Batman”, dijo.
“Y creo que eso fue lo que los llevó a ellos, porque la idea original nace ahí, pensando en cómo volver a reinterpretarnos en la propia historia y cómo, a partir de la ficción fantástica, el legado de este país se mezcla con la idea de que hay Elseworlds en DC Comics y de que siempre juegan un poco con la reinterpretación de sus propios personajes”, afirmó Horacio Garcia Rojas.

La ética detrás de Batman Azteca
En el caso específico de esta producción todo lo hecho en el pasado confirma un nivel ético: “Batman Azteca es una propuesta de un estudio que está siempre tratando de hablar del país que lo cobija y donde nace, que es México. Y a mí me parece que es lo que tendríamos que hacer”, destacó.
“Creo que los medios audiovisuales en México van a cambiar y, aunque ya somos potencia, van a potencializarse todavía más cuando aprendamos que las historias que se han gestado aquí son lo suficiente para mantener una industria viva y llena de magia”, declaró a su vez el actor.
Pero, ¿qué hace a Batman tan adecuado para adaptarse a otros tiempos y épocas? “Tiene que ver con que es probablemente de los únicos superhéroes que son completamente humanos y que eso los hace vulnerables, además que su historia de origen tiene que ver con la pérdida y el dolor. Es algo con lo cual todos conectamos”, comentó.
“Él vive un drama fuerte al ser un hombre que lo tiene todo a nivel monetario, en medios de producción, pero también sabe que el dinero no va a comprar la felicidad. Hay un dolor grande y decide transformarlo en justicia, entendiendo que hay algo que es más grande que él mismo”, externó Horacio García Rojas.

La oscuridad que lo hace único
Desde distintos puntos de vista es un personaje fascinante: “Creo que esa oscuridad y los matices que tiene el personaje lo hacen mucho más complejo que muchos otros, tanto de DC como Marvel y muchas otras compañías de cómics”, mencionó.
“Es algo que lo hace único y especial. Y eso justo propicia que se puede adaptar a muchos contextos, porque la pérdida y el dolor es algo propio del ser humano con lo cual conectamos casi todos los individuos de diferentes latitudes y procedencias”, sumó el talentoso actor.
Cabe resaltar que esta reinvención del Caballero de la Noche tiene algunos cambios conforme al canon habitual que lo hacen más mexicano.
“Este Batman pierde a su padre, ya había perdido a su madre. Y la idea de un buen padre es algo bonito. Siempre creo que la mejor manera de combatir, por ejemplo, el machismo es hablar de buenas paternidades y que está chido ser un buen papá pues es una gran oportunidad donde tu vida va a crecer si la asumes”, expresó.
Un Batman marcado por la paternidad y la colectividad
“Y por eso, ante la pérdida y la soledad genera un rencor, un odio hasta que Akatzin se convierte en su figura paterna y el cobijo y amor que le da, él entiende que la justicia es el camino y no la venganza”, opinó Garcia Rojas.
El actor destaca también más peculiaridades: “Otra de las diferencias es que él siempre es un guerrero. Entrena para ser un guerrero en el día abiertamente. Aquí la diferencia entre Yohualli Coatl y Batman, no es tanta, pero entiende que en la noche necesita ser algo más”, dijo.
“A partir de asumir su ingenuidad y asumir su error es que puede aprender y abrazar al futuro Caballero de la Noche y saber que necesita prepararse más, sobre todo que necesita ser más inteligente, pensar desde otra perspectiva. También sabe trabajar en equipo, a diferencia un poco de Bruce Wayne”, explicó el actor.
El personaje de ahora tiene una particularidad social: “Yohualli entiende que necesita el cobijo de la colectividad, tanto así que se vuelve el líder de todo un ejército y después pasa esa batuta en algún momento de la historia y a mí eso me emociona mucho porque justo si es nuestro Batman, que respeta muchas cosas del lore de DC Comics y del personaje clásico que conocemos y al mismo tiempo le regala otras que lo hacen una interpretación única y especial”, dijo.
“El público es el que va a decidir si está de acuerdo con nosotros en que esto es un pedacito de magia que este país le está regalando a Batman”, añadió.
Poison Ivy y el choque cultural
Esa fantasía histórica está llena de grandes detalles para los fans del encapuchado, pero Horacio se queda con una parte específica de esta reinvención.
“A mí me emociona mucho la reinterpretación de Poison Ivy. Pensar en ella como una diosa que protege a la naturaleza, que puede ser la mejor maestra pero al mismo tiempo puede ser capaz de destruirte en dos segundos si ella ve que eres una amenaza para lo más importante que tiene la vida, que es la vida misma, es interesante”, expresó.
“Entonces, en este contexto donde los que vienen del otro lado del mar están talando los árboles y están destruyéndolo todo, Ivy se da cuenta de que necesita aliarse con este joven Yohualli Coatl”, continuó.
“Pero supongo que si en algún momento siente que él y los mexicas comienzan a destruir también a la madre naturaleza, tampoco va a tener piedad sobre ellos porque no toma partido por nadie, solo por cuidar la naturaleza”, manifestó Garcia Rojas.
Para el actor dentro de la cultura pop hay una forma de comunicar que conecta con ciertos valores:
“Esa es la poesía que a mí más me gusta dentro de los cómics, que no es una villana ni una heroína, simplemente es una mujer que tiene sus ideales muy claros y puede aliarse en algunos momentos a Batman porque siente que los demás están destruyéndolo todo o puede sentir que es capaz de destruirlo todo y entonces volverse enemiga de él”, enfatizó.
“Me gusta mucho esa reinterpretación y las posibilidades que puede tener el personaje. Sobre todo hasta dónde van a ser aliados”, añadió.
Una fantasía latinoamericana en clave de superhéroe
Finalmente, Horacio abogó por las historias y fantasía que hay en Latinoamérica: “Hay que entender el poder que hay aquí. Cada que se acerca una convención, ves el talento de los ilustradores y contadores de historias en México y dices ¿por qué no tenemos una industria potente en la fantasía y la ficción? Hay que apoyarla porque hay talento y hay historias”, comentó.
“Es un país lleno de ellas, con 68 lenguas vivas, además del español. Cada una de ellas tiene sus leyendas, sus maneras de ver el mundo, sus propias historias y contextos. Hay mucha magia”, siguió.
“Pareciera como que apenas el mundo está descubriendo que existe un libro llamado Pedro Páramo a partir de la película, pero tiene años o que Jorge Ibargüengoitia escribió narrativas a partir de hechos periodísticos, con la serie de Las muertas”, enfatizó.
“Apenas estamos descubriendo que en Argentina había una novela gráfica importante como El eternauta. Mucha gente se enteró que Cien años de soledad es uno de los libros más importantes, no solo de América, sino del mundo”, continuó el histrión.
“La fantasía y la ficción latinoamericana está presente y tendríamos que apoyarla más. Y creo que a partir de la ciencia ficción, la fantasía y la novela gráfica es el gran camino para lograrlo. Estoy muy contento de que exista Barman Azteca y estaría muy contento de que en el futuro haya más proyectos que también voy a apoyar como público. Es un camino bien interesante”, concluyó.