Ana Zamboni: “Nos gustan las historias que no pasan desapercibidas, que provocan diálogos y reflexión”
La noche inaugural del 24° Festival de Cine Alemán encendió el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris con cine, música en vivo y un gesto político en apoyo a Palestina, el pasado martes 23 de septiembre.
La proyección de Köln 75 —película sobre el mítico concierto de Keith Jarrett en Colonia— fue acompañada por una pieza original de Los Shajatos, con la participación de Ilse Salas.
Improvisación, jazz y cine marcaron el arranque de una edición que tendrá como eje lo controversial.
Tras esta apertura, el festival se desplegará por distintas sedes de la Ciudad de México hasta el 4 de octubre, combinando lo mejor del cine alemán contemporáneo, diálogos con creadores, retrospectivas y actividades especiales.
“Decidimos entregar este premio no solo como un reconocimiento al cine alemán, sino siempre procurando el diálogo entre las culturas y la creatividad de estos dos países”, explicó en entrevista con Clímax en Medio, Ana Zamboni, directora del festival, sobre la transformación de la semana de cine alemán en un festival con premios e intercambios creativos.

Competencias Kino: cine alemán emergente y talento mexicano
El festival celebra la segunda edición del Premio Kino, que distingue al mejor largometraje alemán (nueve óperas primas y segundas películas en competencia) y al mejor cortometraje mexicano (nueve producciones seleccionadas).
Ambos reconocimientos buscan impulsar el intercambio entre ambas cinematografías y se entregarán el 27 de septiembre en el Goethe-Institut Mexiko.
Zamboni destaca que incluir cortometrajes mexicanos en la programación no solo beneficia a los realizadores, sino también al público:
“La gente que va a ver el corto mexicano porque le gusta, se queda a ver un largometraje alemán. Este intercambio no solo se da entre cineastas, sino también entre las audiencias”, expresó.
Entre los casos emblemáticos de este intercambio está Andrés Lo Sánchez, ganador del Premio Kino 2024 al Mejor Cortometraje Mexicano con Coronas negras.
El director viajará a Alemania al Festival Internacional de Cine Documental y de Animación de Leipzig para desarrollar nuevos proyectos documentales y de largometraje enfocados en la comunidad afro-mexicana.

Estrenos y galas imperdibles
Entre los estrenos nacionales destacan Riefenstahl de Andres Veiel; De Hilda con amor de Andreas Dresen y Muriendo de Matthias Glasner, además de tres galas especiales: Sound of falling, candidata alemana al Oscar 2026; La luz de Tom Tykwer, que inauguró la Berlinale; y Dos a uno, comedia ambientada en la reunificación alemana.
Cine para todas las edades
La programación incluye también un espacio para niñas, niños y adolescentes, con películas como Saludos desde Marte y Un verano de sorpresas, acercando la diversidad del cine alemán a públicos jóvenes.
“Van a ver un cine diferente… historias que no pasan desapercibidas, que provocan diálogos y reflexión”, aseguró Ana Zamboni, invitando al público a sumergirse en estas experiencias cinematográficas únicas.
Retrospectiva: Rainer Werner Fassbinder
El gran homenajeado de esta edición es Rainer Werner Fassbinder, figura clave del Nuevo Cine Alemán.
Una retrospectiva permitirá revisitar clásicos como Todos nos llamamos Alí, El matrimonio de María Braun y Las amargas lágrimas de Petra von Kant, recordando la vigencia de un cineasta que desafió la moral y la política de su tiempo.

Invitados y actividades especiales
Diez invitados internacionales —directores, productores, fotógrafos y editores— estarán presentes para dialogar con el público mexicano.
A ello se suman cinco eventos especiales, que incluyen talleres, charlas sobre cine fotografía, diálogos con cineastas y un espacio de reflexión sobre la gentrificación cultural.
Clausura ochentera en Chapultepec
El festival cerrará el 4 de octubre en la Casa del Lago con un picnic musicalizado por éxitos de los años 80.
La clausura proyectará Kamikaze 1989, thriller cyberpunk protagonizado por Fassbinder, en un guiño al espíritu futurista y extravagante que marcará el cierre de esta edición.
Más que una muestra de cine, el Festival de Cine Alemán propone un espacio para pensar desde la incomodidad y la provocación artística.

“Estos diálogos, además de surgir con sus acompañantes, pueden también proyectarlos con los y las y les cineastas que nos están visitando que son los creadores de estas películas. El provocar estos diálogos entre los creadores es inigualable”, dijo la directora.
“Además las historias que hemos elegido, son historias que no pasan desapercibidas. Los, las y les cineastas mexicanos y alemanes son muy valientes, presentan temas y personajes también que no son de fácil digestión, son de verdad alimento que te hace generarte ganas de investigar más”, concluye Ana Zamboni.